sábado, 21 de febrero de 2015

MOVIMIENTOS DE INDEPENDENCIA EN CÓRDOBA

Tomado de: http://www.medellincultura.gov.co/

Por: Luis Martínez  Aleán.


Desde la llegada de los españoles a tierra cordobesa, se enfrentaron con los nativos, no fue fácil la conquista en la cultura Zenú. Siempre hubo descontento por parte de los indígenas. Los españoles utilizaron la fuerza para imponer su hegemonía.

En plena época colonial, entre los años de 1542 y 1546, los caciques Aloba en Jegua y Oyz en Jagua, organizaron y dirigieron una fuerte rebelión contra los españoles con buen éxito, ya que murieron muchos hispanos pero nuestros caciques también murieron en ese conflicto. Más tarde en el año de 1605, se anexaron los cimarrones estaban distribuidos por todos los hatillo de Cintura, Ure, Carate y Jegua, en este último, en el hatillo de propiedad del fray doctrinero Urbano Galeano, fue atacado por el cimarrón Domingo Bioho, después organizaron los indígenas y los cimarrones sucesivas revueltas en contra de los ibéricos españoles.

Los negros continuaban unidos con los nativos para enfrentar a los sucios barbudos y tomando como bandera el ataque de Bioho. Los zambos, los palenqueros libres y los nativos indígenas se unieron a Uré, Caraté, Cintura en el alto San Jorge, se alzaron en una trifulca en el año de 1693. Los indígenas de las sabanas, se organizaron en Chinú, San Andrés de Sotavento, San Benito de Abad y Corozal para un levantamiento contra los hispanos.

En el año de 1781, se da el movimiento de los comuneros, esta revuelta sirvió para que se prepararan cinco años más tarde en Ayapel. Se organizaron los nativos libres, negros y zambos para un fuerte levantamiento e instaurar un gobierno independiente con Cabildo Abierto en forma de comuna, el cual se realizó durante tres meses, desde el 14 de septiembre hasta el 19 de diciembre de 1785. Fue el Primer Levantamiento de Independencia Contra los Españoles habido en lo que hoy es Departamento de Córdoba, más exactamente en el municipio de Ayapel.
Así este descontento de parte del pueblo, no solamente en la región cordobesa, sino en toda la Nueva Granada, preparó las condiciones para el 20 de julio de 1810 como día de la independencia en Colombia.
Nota bibliográfica: Fals Borda, Orlando. Resistencia en el San Jorge, Historia Doble de la Costa3, Carlos Valencia Editores, Bogotá, 1986.

INDEPENDENCIA

Curiosamente la independencia de la Nueva Granada (Colombia) ocurrida el 20 de julio de 1810, no se dio en la región del Sinú sino hasta años más tarde.
MOVIMIENTOS DE LOS COMUNEROS
La primera revuelta en contra de los españoles se denominó Movimiento de los Comuneros. El hecho ocurrió en 1781: fue un descontento total por el mal gobierno de los hípanos de Nueva Granada.
CAUSAS DE LA INDEPENDENCIA
Fueron dos tipos de causas las que influyeron para que la independencia se diera: internas y externas.
Causas internas: citemos las más sobresalientes, la desigualdad por los realistas (españoles) contra los criollos. En el régimen colonial, los criollos estaban excluidos para desempeñar altos cargos políticos y obligados a pagar altos impuestos por mandato de la corona española. El indio era visto como algo inferior, los negros estaban en las más bajas categoría social, solo servían para trabajar.
El comercio estaba monopolizado por los peninsulares hispanos. El movimiento de los comuneros había colocado un ejemplo de rebeldía. También se gestaba el movimiento científico de Mutis (Expedición Botánica) y nacían, además, nuestros precursores de la independencia.

Causas externas: las más importantes son:
La independencia de los Estados Unidos. La influencia de los enciclopedistas en el ambiente americano, la crisis política de España en 1808 y el Nepotismo Ilustrado. Está claro que estas causas sirvieron de ejemplo a nuestro país para que en ese momento pensara en forma diferente y buscara el camino de la independencia.

20 DE JULIO DE 1810
Antes de las revueltas que se daban por el maltrato del gobierno español, las condiciones estaban dadas para la independencia de la Nueva Granada. España comisiono a Antonio Villavicencio para que mediara ante los problemas de la Nueva Granada. Este hizo concesiones con los criollos en Cartagena y creo una Junta de Gobierno y esto alarmo a las autoridades de Santafé. Hubo descontento por todos los lados, él permitió los acontecimientos del 20 de julio. Con las condiciones dadas para un levantamiento, Luis Rubio y los hermanos Morales, el día 20 de julio a las 10 de la mañana se presentaron en el almacén de José González Llorente se negó a hacerlo y los Morales aprovecharon la ocasión para golpearlo e incitar al pueblo a que protestara. Los chisperos se encargaron de promover la revuelta, gritando: ¡queremos junta! ¡Viva el cabildo! Y lograron que la gente, reunida por ser día de mercado, se lanzara contra las residencias y almacenes que pertenecían a los españoles.
Fue entonces cuando José Acevedo y Gómez, salió al balcón y dirigió una proclama al pueblo con el fin de convencerlo para que se quedará y apoyara la Junta; entre tanto José María Carbonell, un criollo, corría por las casas, los talleres y las veredas vecinas de Santafé y animaba al pueblo a que se congregara en la plaza y pidiera cabildo abierto.
Se escucharon los gritos: ¡Viva el Rey y muera el mal gobierno!
Hubo apoyo de la gente y se conformó la junta de Gobierno constituida por Camilo Torres, José Miguel Pey, Joaquín Camacho, y José Acevedo y Gómez, entre otros. El virrey Antonio Amar y Borbón fue nombrado Presidente de la Junta.

Acta de independencia
Conformada la Junta, se procedió a la elaboración del acta de independencia, en el cual se destacan los siguientes puntos:

Ø  Constitución de un gobierno provisional, mientras se redacta una constitución de acuerdo con las provincias de la Nueva Granada.
Ø  Aceptación de Fernando VII como Rey, siempre y cuando viniera a gobernar en las colonias.
Ø  Nombramiento del Antonio Amar y Borbón como Presidente de la Junta de Gobierno.
Ø  Juramento de los firmantes del acta de defender con sus sangre la religión católica y la autoridad de Fernando VII.

Mientras tanto las leyes españolas continuaban vigentes.
En lo que hoy es Córdoba, el régimen español seguía en forma normal, el 20 de julio no tuvo repercusión en estas tierras del Sinú.
Simón Bolívar, no estuvo en el movimiento de independencia del 20 de julio de 1810. Sin embargo, los gobernantes y alcaldes de Montería y de los 28 municipios, rinden homenaje el 20 de julio a Simón Bolívar. ¡Qué pena para nuestros gobernantes!

CONSECUENCIAS DEL MOVIMIENTO – 20 DE JULIO DE 1810
Se pueden concretar de la siguiente manera:
En lo económico. Se rompió el sistema comercial que España había impuesto a las colonias
En lo político. Aunque no fue una independencia absoluta, el gobierno fue asumido por los representantes de los criollos que siempre habían estado marginados de los altos cargos durante el régimen colonial.
En lo social. Los criollos consolidaron su superioridad y se hicieron más profundas las diferencias entre las clases. Poco después del 20 de julio, los indígenas fueron declarados ciudadanos y con esto aumentaron sus deberes con relación al gobierno.
INDEPENDENCIA DE LA CIUDAD VALEROSA
El movimiento de independencia llegó a la Costa Norte Del Caribe colombiano, el 6 de agosto de 1810, se independiza del yugo español, la ciudad Santa Cruz de Mompós; como fue la primera en la costa, se le llamo Ciudad Valerosa.
INDEPENDENCIA DE CARTAGENA
El descontento de la gente del pueblo y de los criollos también llegó a Cartagena, la revuelta se formó el día 11 de noviembre de 1811, se le llamó Independencia De Cartagena

EN LO QUE HOY ES CÓRDOBA
En esta región cordobesa, el régimen colonial continuaba y se aplicaban las leyes y la santa inquisición españolas. En Ciénaga de Oro, la Inquisición fue aplicada salvajemente por bailar fandango y tocar música pagana, como también, por brujería. Continuaba en esta región el cobro de impuestos con casabe.
A medias llegó a esta tierra la Independencia en el año 1810 y totalmente en 1826. Como evidencia tenemos la “Santa Inquisición” que se aplicó hasta octubre de 1821.
LA PATRIA BOBA
Y de verdad que fue boba, porque en Córdoba no pasó nada nuevo, los españoles eran los dueños y señores de todo el mundo, de la región hoy departamento de Córdoba.

LA RECONQUISTA ESPAÑOLA EN CÓRDOBA
Conocida también como régimen del terror, con ella llegó el asesino más grande de España: Pablo Murillo, apodado “el violento”; los historiadores lo llamaron “el pacificador”
Se tomó a Cartagena por más de 106 días y a los del Sinú les bloqueo la entrada de los víveres que procedían de Montería, Ciénaga de Oro, Lorica, Chima, San Carlos Y Tierralta. Es entonces cuando los cordobeses se organizan al mando de los curas de Berástegui, Chima, Momil, Ciénaga de Oro, y Montería. Entre otros. Y expulsan definitivamente a los españoles, pero quedo la Santa Inquisición hasta el año 1821. Llego a liderar el movimiento de los curas el momposino Germán Pantaleón Ribón y Segura, el cual reunió un grupo de amigos y del pueblo cordobés, liberan al Sinú Grande. Se recuerda a dos hijos de Ciénaga de Oro, ilustres mártires: José y Liberato Pretelt. Por la independencia del Sinú encontramos a Feliciano Otero, Felipe Fernández Madrid y Juan Nepomuceno Lugo, Martin Amador, Santiago Stuard, José María Portocarrero, José María García de Toledo, Miguel Díaz Granado, Manuel del Castillo y Rada y Antonio José de Ayos, entre otros.

7 de AGOSTO DE 1819
El 7 de agosto también se le llama Día de la batalla de Boyacá, en esta fecha, apenas empezaba el movimiento independentista de la zona que hoy es Departamento de Córdoba. Pero si sirvió para mejorar las condiciones de emancipación total como el rechazo definitivo de la Inquisición que solo se dio en el mes de octubre de 1821. Los últimos españoles permanecieron en esta región hasta el año de 1826.
Bolívar solo participo en el movimiento de Independencia de 1819, o sea, la Batalla de Boyacá.
Cuando nuestra patria se independizó, se creó la Republica de Colombia, pero una república unida de Colombia y Venezuela, a la que se incorporaron después Ecuador y Panamá. Por esta Razón se le llamó La Gran Colombia.
Nos independizamos de España y quedamos con los Estados Unidos 
“El gobierno que se de en la república debe estar fundado sobre nuestras costumbres, nuestras inclinaciones, y últimamente, sobre nuestro origen y nuestra patria”

Simón Bolívar

sábado, 14 de febrero de 2015

EL CAÑO DE AGUAS PRIETAS PATRIMONIO NATURAL DE CÓRDOBA

Por: Luis Martínez Aleán




Lo que hoy es el caño de aguas prietas, antes fue el río Sinú hace 50 mil años en el periodo Pleistoceno en este momento las glaciaciones invadieron parte del continente, presentándose la glaciación Wisconsin. Durante el Pleistoceno el mar Caribe Cubría las áreas del Nor-oeste de Colombia penetrando hasta la Serranía de San Jerónimo, luego en el período Holoceno del Cuaternario mejoró el clima, se retiran los últimos hielos, aparece la tierra y los arboles como el roble y otros que tenemos hoy día ene l valle del Sinú. El río Sinú corre sin inconveniente hacía el mar Caribe, pasando por los municipios de San Carlos, Ciénaga de Oro, Chima, Purísima, Momil, Lorica y San Antero.

Luego se desvía el rio por lo que hoy es Mateo Gómez y solo queda un brazo y así lo llamaron algunos investigadores, años más tarde toma el nombre de Caño Martínez por venir del hoy corregimiento de Cereté Martínez. Hace unos 80 años el caño lo llamaron Caño Floral, por su flora y su fauna especialmente por tener a su alrededor muchas flores que lo embellecían y le daba un aspecto de jardín ribereño.

Por último el Caño, le dan el nombre de Aguas Prietas por el color negro de sus aguas producto de la maleza y la composición físico química del suelo. La madre vieja del caño, no era como la que tiene hoy día, antes era más sinuoso y media 135 kilómetros de largo y su anchura oscilaba entre 30 a 100metros; la profundidad era de unos 40 metros. Hoy día, desde 1966 cuando el INCORA, Canalizó el Caño, se redujo a 90 kilómetros de largo, su profundidad oscila entre 4 a 8 metros y su ancho es 40 a 60 metros.
La Ciénaga Grande, llegaba hasta el municipio de San Carlos pero la canalización, la desforestación y la contaminación han reducido esta ciénaga hermana del caño de Agua Prietas, a unos cuantos municipios como Chima, Purísima, Momil, Lorica. Perjudicando notablemente la pesca y la cacería.

Por el Caño de Aguas Prietas entro la civilización de los pueblos ribereños. El caño en sus tiempos idos tenia olas, remolinos y existían cantidades de animales como el caimán, babilla, hicotea, manatí ponche y otros. Las aves oscurecían al volar la parte terrenal, eran miles de aves criollas y otras migratorias  

Los barcos y las barquetonas viajaban cargadas de víveres desde Ciénaga de Oro a Cartagena de Indias. Solo quedan hoy los recuerdos de las últimas barquetonas de Leandro Garcés, sus palanqueros y canaleteros como José Morales y Carlos Ribero con el nombre de “vas tomando” y “Tomás”. Cuando llegaban de Lorica cargadas de telas y víveres, solo se escuchaba la gritería. ¡Llegó Garcés! Todos estos recuerdos quedan del caño en Ciénaga de Oro y Punta de Yánez, cuando llegaron los sirio-libaneses con su comercio.

Los pueblos ribereños tomaban el agua del caño y hoy es una cloaca infecciosa, que espera de sus hijos lo limpien, no le arrojen basura, ni piedra, ni palo, ni mucho menos vidrio.

A orillas del Caño de Aguas Prieta se asentó la Cultura Zenú, que más tarde llamaron los hombres anfibios, lleno de mitos como el hombre Hicotea, el Mohan y otros más. Leyendas como la lamparita sobre el agua en las noches de viaje y cacería; como también la canoa solitaria.

Se acabó la pesca con la mano, se acabó el agua pura que servía para tomar, se nos acabaron las barquetonas llenas de víveres. Solo tenemos el recuerdo de todas estas cosas buenas del caño.


EL CAÑO DE AGUAS PRIETAS PATRIMONIO DE LOS MUNICIPIOS DE SAN CARLOS, CIÉNAGA DE ORO, CHIMA, PURÍSIMA, MOMIL, LORICA

TIERRAS DE ENCANTOS, BRUJAS, DIABLOS, FANTASMA Y LUCES RARAS


Fuente: www.fotolog.com
Cuentan los abuelos que Córdoba era una tierra embrujada en los tiempos que no había luz eléctrica en noches oscuras con calles y caminos solitarios, que solo se escuchaba la Pavita Congona, el Tres Pies, el Pájaro Puerquero, cantando luctuosamente en medio de la soledad y las creencias de la tierra empautada, donde todos le tenían miedo al Gritón, a la Llorona, al Caballo sin Cabeza, al Perro Boca de Candela  y a los ruidos raros que nunca se sabía de donde salían.
En las cosechas de maíz se observaban en las horas de la tarde, Tres Niños Negritos que jugaban y jugaban, también los observaban en los caminos y orillas de las ciénagas, arroyos y pozos, eran los negritos del más allá.
Los hombres que se encontraban solos en las montañas o casas se les aparecida una mujer desnuda que lo llamaba y si el hombre se le acercaba, lo abrazaba duro y lo trituraba con sus fuertes brazos llenos de espinas como puñales que eran enterrados en el cuerpo del hombre; y así moría.
En las noches solitarias se veían luces que recorrían las fincas, caminos y andaban sobre el agua de los arroyos, pozos y ciénagas. Algunas de estas luces eran como gigantescas bolas de candela que corrían por las cercas de los caminos, le llamaban los abuelos “El Entierro” que buscaba a una persona para hacerlo rico, si éste lo sacaba.
Cuando aparecieron los carros en las zonas del Sinú, también apareció un carro fantasma que se veía venir con sus luces fuertes en las horas de la noche y no era nada; muchos conductores se accidentaron porque el carro fantasma los encandilaba y se accidentaban.
Los niños malcriados se los tragaba la tierra por no obedecer a sus padres. Ojala hoy fuera así para corregir a muchos.
Las ciénagas eran protegidas por el Mohan: un monstruo parecido a un hombre viejo de color verde y que salía a los pescadores en las horas de la noche. En el atardecer se escuchaba el Yacabó, pájaro agorero que con su canto macabro llamaba la muerte. Y así sucedía en la comunidad alguien moría, lo dijo el Yaacabó y así era. Por las noches a eso de las siete en el pueblo, se escuchaba cantar una lechuza. Era aviso de muerte, alguien moría.
Los espantos de los animales en las horas de la noche o en la madrugada, era un aviso de muerte. Se espantaban las cocás o el ganado y al día siguiente alguien moría. De igual forma el aullar de los perro en las noches oscuras con ganes de llover, era símbolo de terror, era la noche del Gritón, la Llorona, el Perro Boca de Candela que se comía a los perros que se encontraba a su paso. Sacándole las asaduras.

Dejo hasta aquí porque quiere llover con huracán, la noche es oscura, los animales buscan refugio, se escucha de pronto el fuerte soplar del viento. Una bruja encaramada en el techo pajizo de la casa vecina, de la difunta María Pertuz, deja sonar lentamente sus silbido, dando terror en el pueblo sin luz eléctrica. Algo malo va a pasar la tempestad se aleja, los perros dejan de aullar, la bruja voló convertida en un gran pájaro negro de vuelo pesado; también se escucha el cantar macabro del Tres Pies, la Pavita Congona empieza su triste canto como anunciando que algo malo va a pasar. Ya es media noche y a los lejos se escucha que viene lentamente un jinete a toda prisa como alma que lleva el diablo, se acerca más y más, lo miro, es nada más que le gigante negro con silla de oro y áspero que brilla por la luz de los relámpagos, va rumbo al más allá. AVE MARÍA PURISIMA!!! ESEL DIABLO

jueves, 5 de febrero de 2015

8 de marzo: Día Internacional de la Mujer


Por: Luis Martínez Aleán



Sea este el momento para hacer un breve recorrido por el mundo de la belleza del Sinú. Hermosas y fuertes  fueron las mujeres del pasado que dejaron huellas en la historia de la costa Caribe como la India Catalina, que enloqueció a la hueste española y así sucedió con nuestras representantes del otrora en la conquista del Sinú.

Córdoba tuvo mujeres hermosas que le cambiaron el rumbo de la historia patria regional, aquí en el san Jorge, el Sinú y la Sabana, recordemos a las gallardas y diosas como Maniaguá mujer del cacique Mocarí, Nay hija de Caigá. Caigá fue la mujer del cacique Carepa. Tay Doncella linda y legendaria, que con su mirada enamoraba los hombres que tuvieron la dicha de verla, vivió en Cereté y fue la esposa del cacique Té y luego cuando murió este, se convirtió en la mujer del único cacique blanco Tofeme. Pero el universo de la cultura anfibia Zenú y en sus doradas tierras aparece la madre del amor y la belleza Manexca que vivió en San Andrés de sotavento, endiosada por los hombres de ese entonces, se creía que las mujeres lindas provenían de las esposa del cacique Mexión. Manexca y Mexión tuvieron como fruto a Tuchín, Chimá y Arache.

Otra beldad indígena fue la diosa Totó que vivió en Chinú y que tuvo como característica especial de no pisar el suelo porque caminaba sobre las espaldas de otras mujeres, era tan bella que no merecía caminar por la tierra sino sobre una alfombra humana que la conformaban las doncellas jóvenes de la época. Fue también belicosa contra los blancos españoles que destruyeron todo a su paso, esta bella mujer se tuvo que cortar un seno para tirar mejor la flecha a sus enemigos hispánicos.
Dabeiba fue la otra diosa de la cultura dorada Zenú. Dabeiba que hoy es Antioquia pero que en el pasado hizo parte de esta misma tierra, rica en oro que con su metal precioso adorno la naturaleza del Sinú, constituyéndose así como el mundo dorado. Buriticá y Dabeiba se unieron para que estas tierras del San Jorge, el Sinú y las Sabanas fueran orfebres extendiéndose hasta el cacique loba en santa Cruz de Mopox.


En Sahagún tuvimos la diosa Barají. En el alto Sinú, la diosa de la fecundidad y la fertilidad Onomá a la orilla de la ciénaga de Betancí. La ciénaga de Betancí fue agraciada por las jóvenes más lindas del mundo Zenú, hasta allá iban las jóvenes de esta región para celebrar el rito de la sequía que consistía en dejarse triturar de los caimanes de esa ciénaga para que lloviera y fertilizará el suelo para las cosechas. Pero el cacique Quimarí se metía silenciosamente en el agua y se apoderaba de estas bellas mozas para hacerlas mujer de él.

En Ciénaga de Oro, tierra dorada por los mejores orfebres precolombinos y con hermosas mujeres que engalanaron este rico terruño. Tenemos especialmente dos princesas: Yulé y a la bella Filó. Yule hija del cacique Tangarú y Filó, mujer del cacique Panaguá.
Las mujeres indígenas de esta región cordobesa, eran físicamente bien esculturadas, de buena estatura, buen busto, nunca se le aguaron los senos, fieles y sobre todo hermosas, de pocas arrugas, de cabellos largos y negros, vestían con faldas largas hasta los tobillos en tejidos de lana estampados con símbolos mágico- religiosos parecidos a las pintas del sombrero vueltiao. Para ceremonias especiales las indígenas se colocaban brasier en oro puro con diademas, pulseras, tobilleras, collares, narigueras, oregueras y brazaletes, todo en oro de alta valía.

Las mujeres latinoamericanas son producto de la mezcla triétnica de indígenas, blanco y negro. Situación que ha dado las mujeres más lindas del universo, de color de piel canela, blanca y morena que han hecho cambiar la historia a grandes hombres del mundo por su belleza, sentimientos y con perfil inefable, donde la batalla de guerra fue cambiando por un nidal afrodisiaco.

Todas tienen cualidades de mujer bonita, porque la belleza no tiene norma específica: la gorda es bonita, la delgada es linda, la alta es esbelta, al morena es simpática, la blanca es hermosa, la de color canela es atractiva, la bajita es agradable, la de mediana estatura es sensual, en fin todas son hermosas. Por esta razón, el escritor cordobés Luis Fernando Galindo Guerrero, escribió un poema que tituló El Tiempo De Espalda que dice textualmente:

“De frente
Vienes perfumando
los caminos
e irradiando juventud”


También nuestro músico Pablo Flórez compuso un disco a la mujer bonita: La Aventurera y nuestro himno folclórico musical María Varilla que identifica a una mujer que vivió en Ciénaga de Oro.

“Donde no hay una mujer, el necesitado solloza” Eclesiástico.